Vamos a salvar ovejitas, pero sin prisa
Flockers es un puzle con plataformas muy entrenido y lleno de humor macabro. Para los nostálgicos es como volver a los tiempos de Worms y Lemmings. Para los demás, Flockers es la ocasión de visitar por primera vez un género de puzles en los que tan gratificante es ganar como perder. ¿Estás listo para conducir tu adorable rebaño?
Tantas ovejas que liberar y tan poco tiempo
Hay que liberar las ovejas. Todas. Nadie sabe muy bien por qué, pero están atrapadas en una fábrica abandonada. Una fábrica peligrosa, llena de sierras circulares, pinchos y otros peligros. Es extraño. Es absurdo. Pero es lo que hay.
Salvarlas parece fácil: una vez salen del tubo, solo tienen que atravesar un pequeño trozo de fábrica y ser aspiradas al otro lado. Pero las ovejas son estúpidas. Por si solas no pueden sobrevivir. Solo saben avanzar y balar alegremente, y sin ayuda caerán en el primer desnivel y se estrellarán.
Por suerte, tú eres su pastor y salvador. A ti te corresponde la ingrata tarea de darle a cada oveja los poderes que se merece, como volar o saltar, y de construir escaleras o puentes para que puedan ser aspiradas sin peligro. Pero cuidado: los recursos a tu disposición son limitados, incluyendo el poder de parar el tiempo.
Cuando superes cada nivel, Flockers te premiará con estrellas según la cantidad de ovejas rescatadas, el tiempo usado y las bonificaciones recogidas (que permiten, por ejemplo, debloquear niveles secretos). Hay más de sesenta niveles y veinte logros por conquistar, pero ten por seguro que no será un paseíto.
¿En serio quieres salvar esas ovejas?
Flockers se juega como un cruce de Lemmings y World of Goo, pero con funciones que facilitan bastante las tareas de rescate, como la posibilidad de parar el tiempo o la de seleccionar múltiples ovejas arrastrando el dedo o el puntero del ratón. Son ventajas que hacen que la dificultad de Flockers sea más suave que la de Lemmings.
Los niveles más duros obligan a pensar de manera estratégica y administrar bien los poderes y herramientas. Si uno de los niveles te desespera, puedes saltarlo a cambio de gastar lana dorada; 10.000 bolas cuestan 99 céntimos de euro, y con un desembolso de casi 4 euro puedes comprar la friolera de 65.000.
En las opciones de Flockers puedes cambiar el diseño de las ovejas en cualquier momento. Hay más de 18 diseños de oveja, y el más caro cuesta 8.500 bolas de lana. El aspecto de las ovejas hace que volver a jugar los niveles sea una experiencia levemente distinta. Pero el cambio mayor llega con el modo sangriento.
Tras activar el modo sangriento, Flockers se convierte en una pequeña máquina de tortura en la que ovejas de aspecto variopinto acaban por ser trituradas y aplastadas. Es un aspecto tan cuidado que hace que te preguntes si realmente Team 17 quiere que salves esas lindas ovejitas o prefiere que te deleites con tus errores.
Un juego retro con piel de moderno
Si hubiese salido en 1991, que es cuando apareció Lemmings, Flockers hubiese sido un gran éxito. Un cuarto de siglo después, la revisitación de los clásicos hace sonreír a los veteranos, pero no asombra. Sin embargo, perdonarle la jugada a Team 17 es fácil: a fin de cuentas, inventaron los Worms y las ovejitas explosivas.
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